El mercado automovilístico cada vez ofrece más opciones en lo que a motores se refiere. De los térmicos a los eléctricos puros, los híbridos, los de autonomía extendida o incluso a los de hidrógeno, hay un motor para cada conductor.

Pero, ¿todos mantienen su valor de igual manera? Y es que el valor residual de un coche es un dato importante que hay que tener en cuenta, sobre todo de cara a venderlo en el mercado de segunda mano.

Un reciente informe Ganvam, la Asociación Nacional de Vendedores y Reparadores, ha revelado cuáles son los coches que, según su motor, más valor conservan con el paso de los años.

Se trata de los vehículos híbridos no enchufables, que mantienen un 70,8% de su valor tres años después de su primera matriculación. Este dato sitúa el precio medio de estos vehículos en 21.555 euros al cierre del primer trimestre del año. Además, estos coches representan el 37% de las matriculaciones al cierre del primer trimestre.

El valor de los coches según su motor

En comparación, los vehículos de gasolina mantienen el 67% de su valor tras recorrer 60.000 kilómetros, con un precio medio de 16.200 euros. Por otro lado, los vehículos diésel, que han perdido protagonismo en el mercado, conservan el 65% de su valor inicial después de 36 meses y 90.000 kilómetros recorridos.

En el caso de los híbridos enchufables, este porcentaje asciende se queda en el 61%. La peor posición es para los coches eléctricos, que se quedan solo con un 50% de su valor después de tres años y 60.000 kilómetros.

Los coches de segunda mano, por edad

Además, el índice de Ganvam analiza el valor de los vehículos de ocasión por antigüedad. Con más de la mitad de las ventas concentradas en modelos de más de 10 años, el precio medio de estos vehículos se situó en 14.500 euros al cierre del primer trimestre, un incremento del 4,7% respecto al mismo periodo del año pasado.

Este aumento se debe principalmente a la demanda de modelos de más de 15 años, cuyo precio ha crecido un 11,5% en el último año. Sin embargo, el precio medio de los vehículos con menos de diez años de antigüedad ha disminuido un 2,2%, situándose en 20.893 euros, debido a una mayor oferta de usados procedentes de flotas de renting y alquiladoras.