Así limpiarás las lámparas de forma efectiva y con el mínimo esfuerzo

Es fundamental prestar atención al tipo de material para elegir el método y productos más útiles en cada caso

Así limpiarás las lámparas de forma efectiva y con el mínimo esfuerzo

Una limpieza correcta (sin productos abrasivos) facilita que las lámparas luzcan como el primer día (AndreyPopov / Getty Images/iStockphoto)

Tener un casa impecable no es tarea sencilla. Y aunque pareciera que la limpieza del hogar no necesita de un manual, pasa a menudo que, cuando nos disponemos a acabar con la suciedad, ignoramos o descuidamos ciertos lugares o elementos que pueden acumular una gran cantidad de polvo. Las lámparas, por ejemplo.

De cristal, metal, papel, mármol, plástico, madera, textiles… las lámparas suelen ser una de las grandes olvidadas en la limpieza del hogar. Y, si nos acordamos de ellas, pocas veces acertamos con la forma correcta de darle ese ‘repasito’ que necesita. Sin embargo, mantener en buen estado este elemento imprescindible de nuestro hogar es factible, y la limpieza correcta hará que la lámpara luzca como el primer día, ¡palabra de los expertos!

Las lámparas pueden acumular una gran cantidad de polvo, y no siempre nos acordamos de ellas al hacer la limpieza del hogar

Las lámparas pueden acumular una gran cantidad de polvo, y no siempre nos acordamos de ellas al hacer la limpieza del hogar (Alex Potemkin / Getty Images)

Nunca manipules la lámpara conectada

Para que las lámparas iluminen perfectamente una estancia debemos asegurarnos que estén totalmente limpias, de forma que no impidan el paso de la luz. Antes de realizar la limpieza es importante tener en cuenta que la lámparas no estén encendidas y, si es posible, desconectarlas de la red eléctrica, advierte Nora Antonia Salvo, responsable de cocinas baños y, hasta hace un mes, de iluminación de IKEA. Además, no se debería volver a enchufar a la corriente hasta que la lámpara quede bien seca.

Usa la herramienta adecuada

Ya sea de mesa, techo o pared, a la hora de elegir una lámpara nos podemos encontrar también con un amplio abanico de diseños elaborados en diversos materiales, por lo que en el momento de limpiarlas será necesario utilizar el utensilio adecuado. La especialista aconseja, por ejemplo, utilizar un plumero para las lámparas hechas con elementos naturales como el bambú o de papel, un cepillo para las pantallas de tela, un paño húmedo para las metálicas, y un paño seco para el vidrio. Y si se utiliza un producto de limpieza, es necesario asegurarse de que sea una solución suave, que no afecte al material de la lámpara.

Para las lámparas hechas con elementos naturales como el bambú o el papel, lo mejor es usar un plumero

Para acabar con la suciedad necesitamos productos y utensilios relativamente básicos, como agua, amoniaco (en poca cantidad y diluido con el agua), detergente neutro que no sea agresivo, quitamanchas, desengrasantes, un plumero, un paño suave de microfibras y, en algunos casos, un vaporizador, comenta Carlos Cabra Vázquez, de La Casa de la Lámpara, tienda on-line especializada en lámparas de diseño.

En otros casos como las pantallas o tulipas acabadas en piel o cuero, se puede recurrir a cremas hidratantes para nutrir y dar elasticidad. Siempre se debe usar cremas específicas para este tipo de material, añade Cabra Vázquez. “Es bueno leer bien las características de los productos que se vayan a utilizar y, ante cualquier duda, probar en una sola parte de la superficie de la lámpara o pantalla y no aplicar al resto hasta no ver los resultados”, recomienda.

Las bombillas y la ubicación cuentan

Para un correcto mantenimiento se recomienda limpiar una vez al mes las lámparas, aunque también dependerá del tipo de luminaria y de su ubicación, sea de interior o exterior. Además hay que tener en cuenta algunas otras precauciones. Para la limpieza de lámparas de techo o colgantes, se debe colocar debajo plásticos, para proteger las otras superficies sobre la caída de líquidos. Para luminarias de cocina, se debe usar desengrasante, ya que se suele adherir grasa también en la lámpara.

Por otro lado, las bombillas también acumulan polvo y esto hace que se reduzca su luminosidad. Los especialistas aconsejan también darles una limpieza de vez en cuando, que debe acometerse con un paño previamente humedecido. Antes que nada hay desenroscarlas, ¡no olvidemos este paso!

Las bombillas también acumulan polvo, y retirarlo permite que recuperen luminosidad

Las bombillas también acumulan polvo, y retirarlo permite que recuperen luminosidad (Sepidehmaleki / Getty Images/iStockphoto)

Un método para cada pantalla

Las lámparas, además de ser un elemento imprescindible en cualquier casa, a menudo forman parte de la decoración, de modo que es normal tenerlas de diferentes formas y de distintos tipos de materiales en la pantalla o tulipa (tela, plástico, cristal…). Desde La Casa de la Lámpara apuntan la importancia de adaptar la limpieza de cada pantalla según el tipo de material y facilitan esta guía.

1. De tela

Puedes usar el aspirador y pasarlo por la pantalla con mucho cuidado para quitar el polvo acumulado. En el caso de que tenga manchas, puedes utilizar una espuma de limpieza en seco. Se aconseja aplicar los productos de lavado en seco con un cepillo blanco y frotar suavemente, y no usar agua o líquidos.

2. De pergamino

Las lámparas de pergamino son bastante delicadas. La mejor forma de mantenerlas como nuevas es limpiándolas con regularidad. Pasando un simple plumero basta para quitarle el polvo. Si está muy sucia, usa un barreño con agua y jabón neutro. Mete una esponja en el agua y escurre muy bien. Luego empieza a frotar suavemente por la superficie de la lámpara. Recuerda que, al fin y al cabo, viene a ser como de papel, y no debe quedar demasiado mojada. Una vez finalizado, déjala secar bien. Evita tocarla con las manos.

3. De papel

Basta con un paño seco suave para quitar el polvo y, en caso de tener algún roce o arañado de suciedad, tratarla con una goma de borrar blanca de forma suave. En algunos casos el papel puede estar revestido de un plástico fino, y en ese caso puedes optar por un paño húmedo.

4. De cuero

Para limpiar el cuero de una tulipa o pantalla, utiliza un trapo de microfibras, agua y un producto limpiador específico con detergente para cuero. Primero humedece el paño con agua y limpia la pantalla suavemente en forma rotativa o circular. Si el cuero presenta manchas, será necesario añadir un detergente neutro específico al agua, para una limpieza más profunda. Una vez finalizada, se deja secar bien. El cuero, al ser piel, necesita que sea hidratada y acondicionada, por lo que puedes utilizar una crema especial para hidratarlo y evitar que se seque. Eso le dará elasticidad y brillo. Lo ideal en las pantallas de cuero es limpiarlas e hidratarlas dos veces al año.

5. De plástico

Las pantallas de plástico puedes limpiarlas con un paño húmedo y luego secarlas con un trapo que no deje pelusa.

6. De metal

En las lámparas de metal las manchas pueden eliminarse frotando un trapo humedecido con limpiacristales

En las lámparas de metal las manchas pueden eliminarse frotando un trapo humedecido con limpiacristales (Kitsada Wetchasart / Getty Images/iStockphoto)

Simplemente con un paño, o usando un plumero, podemos eliminar el polvo. Si tiene alguna mancha se puede usar un trapo con limpiacristales y frotar hasta que quede reluciente.

7. De seda

Puedes usar un cepillo suave para quitar la suciedad. Este tipo de pantallas son muy delicadas y lo recomendable es usar una limpieza profesional para quitar las manchas.

8. De mimbre

Lo ideal es usar una aspiradora para quitar el máximo de polvo que se acumula entre los huecos. Si tiene alguna mancha superficial, puedes limpiarla con un paño húmedo.

Otros trucos útiles

Lámparas de cristal

El mejor sistema para limpiar las lámparas de cristal es mezclar en un recipiente con pulverizador agua y amoniaco a partes iguales. Después coloca un plástico en el suelo debajo de la lámpara, porque cuando eches el líquido empezará a gotear. Si la lámpara tiene pantallas, también se deben proteger con plástico antes de comenzar. Luego empieza a pulverizar la lámpara (cuidado con las bombillas y zonas eléctricas, hay que evitar que les caiga agua encima). Haz la limpieza de arriba hacia abajo. Deja actuar el líquido, que poco a poco irá goteando en el plástico del suelo. Una vez haya dejado de gotear y esté seca, puedes retirar el plástico.

Lámpara de araña

Para limpiar las lámparas de araña mezcla amoniaco, jabón y un poco de alcohol. Vierte en un recipiente pulverizador y agita bien. Antes de empezar a aplicar la mezcla protege con un plástico el suelo debajo de la lámpara porque caerá el líquido y es un riesgo, también para los muebles cercanos. Una vez está toda la zona protegida, comienza a pulverizar la lámpara cuidando que no caiga líquido sobre los componentes eléctricos y bombilla. Finalmente deja secar.

Lámpara de acero inoxidable

Como para la lámpara de cristal, se debe mezclar agua y amoniaco en un pulverizador. Agitar bien y comenzar a pulverizar la lámpara evitando que llegue de forma directa a la bombilla y a los elementos eléctricos. Deja actuar unos 2 o 3 minutos. Luego pasa un trapo suave y limpio por toda la lámpara. Antes de encender la luz, espera a que este bien seca. En el caso de que la lámpara tenga manchas de grasa, puedes probar a usar desengrasante.

Lámpara de cocina

Las lámparas ubicadas en la cocina además de polvo acumulan grasa

Las lámparas ubicadas en la cocina además de polvo acumulan grasa (vicnt / Getty Images/iStockphoto)

Puedes usar una mezcla de amoniaco y agua dentro de un pulverizador o aplicarla directamente con un trapo húmedo. Para quitar la grasa también puedes usar productos específicos que no sean abrasivos. Pulveriza toda la lámpara de arriba a abajo y deja actuar los productos unos minutos. Luego usa un paño seco para secarla…¡Y listo!

Plafones

Lo primero que debes hacer es desmontar el plafón, un proceso por lo general sencillo manipulando una tuerca o los enganches. Luego puedes usar un trapo húmedo para limpiarlo por dentro y por fuera. Según el material se pueden usar diferentes productos, desde el simple paño húmedo, a agua con jabón o limpiacristales. Si el plafón está colocado en la cocina, es posible que haya acumulado grasa. En este caso un desengrasante que no sea abrasivo irá perfecto. Una vez limpio y seco habrá que colocarlo de nuevo.

Fuente: http://ow.ly/biQj30q49uh

Categoría: HOGAR Domingo 22 de Diciembre del 2019